Es más que una bella sonrisa: la Ortodoncia puede ayudarte a mantener tu boca sana. Los tratamientos de Ortodoncia son los que ayudan a mover los dientes que están torcidos o que no se ajustan entre sí correctamente. Al solucionar estos problemas, la ortodoncia puede también mantener tu boca sana, pues los dientes que están torcidos pueden ser más difíciles de limpiar, y aumentan de esta manera el riesgo de contraer enfermedades bucales como caries y gingivitis.

La posición anormal de la articulación de tu mandíbula puede causar chasquidos, jaquecas crónicas y dolores en la cabeza, cara y el cuello que muchas veces se confundimos con migraña u otros problemas. La Ortodoncia es la rama de la odontología que se especializa en el diagnóstico, prevención y tratamiento de todas estas malposiciones dentales y faciales. Así, la meta del Ortodoncista será la de conseguir principalmente salud, seguido de función y estética para sus pacientes. Si los problemas de malposición dental se dejan sin atender, tienden a empeorar rápidamente. Además, la importancia de una sonrisa atractiva no debe subestimarse, puesto que una buena apariencia, frecuentemente, es vital para la autoconfianza.

La mejor edad para iniciar con un tratamiento de ortodoncia es entre los 10 y los 14 años, pues ese es el momento en que la cabeza y la boca de los niños todavía están creciendo y es más fácil enderezar los dientes. Estos tratamientos tempranos son ventajosos pues ayudan a guiar el crecimiento de la cara y maxilares para evitar interferencias durante el cambio de los dientes de leche a los permanentes. Es en ésta etapa cuando se puede aprovechar al máximo la ortopedia dentofacial para redirigir y estimular el crecimiento de los maxilares y obtener los mejores resultados. Sin embargo, es importante aclarar que cualquier edad es adecuada para comenzar con un tratamiento de ortodoncia. De hecho, cada vez son más los adultos que usan brackets y que buscan corregir problemas de mordida o maxilofaciales que no fueron atendidos durante su niñez.

Las maloclusiones

El término técnico para los problemas arriba descritos es el de maloclusión, el cual significa morder mal. Muchos de éstos problemas no solo afectan los dientes sino también la cara causando una mala apariencia personal. Algunos de los problemas dentales y faciales más comunes son los siguientes:

• Dientes encimados o apiñados.
• Dientes muy separados.
• Dientes sobrantes o faltantes.
• Dientes protruídos o “salidos”.
• Maxilar protruído o “salido” y mandíbula muy pequeña.
• Mandíbula inferior muy saliente.

Todos ellos, además de los problemas mencionados, frecuentemente son causantes de desgastes anormales en las superficies dentales y presión excesiva que puede dañar el hueso de soporte de los dientes. Estas maloclusiones pueden ser causadas por malos hábitos como chupar uno o más dedos, colocar la lengua entre los dientes, por tener las vías aéreas restringidas por anginas o adenoides, por la pérdida prematura de los dientes de leche o de los permanentes y por factores hereditarios.

El tratamiento

Mediante radiografías y otras herramientas, tu ortodoncista decidirá si los tratamientos de ortodoncia son indicados para tu caso específico. El tratamiento Ortodóncico se basa en el cálculo de las fuerzas biomecánicas y en la modificación de la estructura maxilofacial mediante la aplicación de aparatos que regulan esfuerzos para mover y posicionar los dientes en su lugar ideal. El proceso puede durar varios meses, pues involucra distintas fases en las que se puede necesitar realizar extracciones de algunos dientes, se abren o se cierran espacios y se rotan los dientes sobre distintos ejes para hacer que tomen el lugar y orientación deseados.

Los dispositivos que se utilizan en la ortodoncia son las bandas, los alambres y los brackets. Estos elementos al trabajar en conjunto, mueven suavemente los dientes hasta la posición correcta, lo cual ayuda a corregir la mordida y ponerla en su posición final. Existen distintos tipos de correctores dentales. Los más comunes son los brackets de metal o plástico que se fijan a la superficie frontal de los dientes. Los correctores “linguales” se fijan a la parte posterior de los dientes. No se ven, pero son mucho más difíciles de limpiar.

Una vez alcanzada la posición deseada de los dientes y maxilares, se inicia la retención, importante etapa que consiste en mantener los dientes en la posición lograda al finalizar el tratamiento de ortodoncia y evitar así que las fuerzas biomecánicas naturales provoquen un retorno de los dientes a su posición inicial. Los factores que pueden influir en el regreso o retorno de la malposición dentaria son:

• Cambios relacionados con el crecimiento.
• Cambios potenciales en los arcos dentales, conforme pasa la edad del paciente.
• Musculatura oral.
• Malos hábitos como empuje lingual, deglusión atípica, etc.
• Mala higiene dental que trae como consecuencia, inflamación de las encías y pérdida de los tejidos de soporte del diente.

La higiene oral

Los brackets que se usan en la ortodoncia tienen espacios diminutos en donde pueden acumularse trozos de comida y placa bacteriana Eso puede causar manchas, puntos blancos, caries y gingivitis. Por eso es importante cepillarse los dientes y usar hilo dental después de cada comida. La buena higiene te permitirá acortar el tiempo de tu tratamiento y mejorar los resultados. Recuerda estos consejos al momento de comenzar con tu tratamiento de Ortodoncia:

• Mantén una buena higiene bucal
• Utiliza elementos de limpieza diseñadas para tratamientos de ortodoncia, tales como enhebradores de hilo dental, cepillos interdentales y cepillos de dientes eléctricos específicos.
• Cepillate los dientes con una pasta dental con flúor y limpia el espacio entre los dientes con hilo dental después de las comidas.
• Utiliza un enjuague bucal antibacteriano.
• Protege tus brackets
• No muerdas lapiceros, elementos plásticos duros ni cubos de hielo.
• No te muerdas las uñas ni juegues con elásticos.
• No comas alimentos duros o pegajosos.

Los costos

El tratamiento Ortodóntico es mucho menos costoso que cualquier tratamiento dental posterior que deba realizarse posteriormente para corregir los serios problemas que se pueden presentar, si no se corrigen a tiempo las maloclusiones. El costo de los tratamientos ortodóncicos depende de la severidad de cada problema. Muchas maloclusiones requieren de tratamientos limitados a costos moderados. La inversión que hagas en tu salud bucal será mínima en comparación con los beneficios recibidos.

Los dientes y la cara son afectados de forma permanente por los tratamientos de ortodoncia, por lo tanto es muy importante que el tratamiento sea llevado a cabo apropiadamente. Los especialistas en ortodoncia limitan su práctica a la ortodoncia y a la ortopedia dentofacial. Han adquirido los conocimientos especializados necesarios para efectuar movimientos dentarios y guiar adecuadamente el desarrollo de la cara y los maxilares durante el crecimiento del paciente. Están ampliamente capacitados para corregir problemas en la dentición de los adultos, lo que les permite ofrecer a cada paciente las opciones ideales para su caso particular, asegurando un resultado estable y funcional para el resto de la vida.

La publicidad

Mito: Existen múltiples ofertas ortodonticas que brindan beneficios inmediatos para la estética facial y función dental a muy bajo costo. Incluso algunas vienen con blanqueamiento dental como parte del paquete.

Realidad: Las ofertas a precios bajos en tiempo indefinido, prolongan el proceso para compensar los costos. Aquellas ofertas que prometen rapidez en el tratamiento, cumplen solamente con una fase inicial, pero no con lo que realmente necesita el paciente.

Duración

Mito: Un tratamiento de ortodoncia dura de 6 a 12 meses.

Realidad: El tiempo de duración de un tratamiento depende de la complejidad de cada caso. Si no es complejo puede durar hasta 12 meses; si se trata de un tratamiento convencional (con un nivel de complejidad promedio) dura 24 meses. Si es complejo, el tratamiento puede durar más.

Manchas y pigmentos

Mito: Los brackets manchan los dientes porque queda un cuadradito marcado en el diente.

Realidad: Los dientes se manchan por no eliminar correctamente la placa bacteriana con un buen cepillado. Es necesario atender las instrucciones que recomienda el ortodoncista.

Diseño de sonrisa

Mito: Un diseño de sonrisa elimina la necesidad de un tratamiento de Ortodoncia.

Realidad: Idealmente el tratamiento de ortodoncia debe ser parte del diseño de sonrisa para que este último sea menos invasivo, más duradero y más natural.

Resultado

Mito: Los resultados de un tratamiento de ortodoncia duran toda la vida.

Realidad: El resultado del tratamiento no dura intacto de por vida, debido a las transformaciones del ser humano. Estos cambios se pueden minimizar con el uso de los retenedores con alguna frecuencia durante la vida.

Cordales o muelas de juicio

Mito: Las cordales mueven los dientes, ejerciendo presión y empujando los dientes.

Realidad: Es relativo, ya que existen personas a las cuales jamás se les desarrollan las cordales o se las extraen, y sin embargo presentan cambios en la posición de los dientes. Se debe estudiar cada caso en particular para decidir en qué momento extraerlas.

Asistir a una consulta de revisión con un ortodoncista es de gran importancia ya que no solo el verse los dientes torcidos es signo de necesidad de tratamiento, otros signos como desgaste de los dientes, problemas en las encías, dolores en la articulación temporomandibular, así como posibles dolores de cabeza son signos de alerta con los que tu organismo te dice que tienes problemas de mordida y por tanto necesitas corregirlos.

Por qué debes consultar con un ortodoncista y no un odontólogo?

Cada día aumenta el número de personas que quedan insatisfechas con los “tratamientos de ortodoncia” y es que no se puede desconocer que el mercado de productos relacionados con la belleza se ha visto invadido de ofertas que prometen beneficios inmediatos o que aseguran ser la panacea  para mejorar la apariencia y función dental a muy bajo costo.

El gran inconveniente es que muchos de estos odontológos que aseguran ser ortodoncistas no han pasado por los rigurosos estudios de post grado de universidades establecidos por la ley y otras veces no alcanzan a completar el tiempo indicado  para prepararse como ortodoncistas especializados.

En la actualidad existen muchas alternativas de tratamientos que se pueden utilizar para lograr los objetivos ideales de estética y función. Sin embargo, es importante reconocer que algunas son más eficaces y seguras que otras. Lo ideal es que solo realicen tratamientos de ortodoncia profesionales que cuenten con el debido soporte científico que demuestre que está debidamente entrenado para tales procedimientos.

Un ortodoncista es un odontólogo graduado, que adicionalmente ha hecho una especialización cuya duración oscila entre dos años y medio y tres años. Siete años y medio de estudios ofrecen muchas más garantías que las que ofrecen odontólogos generales que realizan únicamente cursos o diplomados que solamente duran un año, estudiando solo cada fin de semana.

Consulta siempre con un ortodoncistas de la Sociedad Colombiana de Ortodoncia (SCO)

Antes de someterte a cualquier procedimiento es imprescindible que realices tu consulta en una institución reconocida, donde haya un ortodoncista profesional que sea miembro de la Sociedad Colombiana de Ortodoncia, puesto que esto asegurara que el profesional que te atiende cuenta con la suficiente experiencia en esta clase de procedimientos. En la consulta ortodóntica debes recibir toda la información para que puedas decidir libremente que es lo que realmente necesitas así como resolver todas tus dudas acerca de las consecuencias del procedimiento, los cuidados antes y después del mismo y las indicaciones que debes seguir para obtener un mejor resultado.

Desconfía de todo lo que suene novedoso, bonito y barato.

Es cierto que se han creado diferentes tipos de brackets y técnicas que van acorde con los constantes cambios tecnológicos pero en el fondo es el profesional el que sabe usar y aplicar la técnica  para cado caso específico, de modo que pueda lograr el mejor resultado, pues la tecnología en si no es la solución.

Hay que aclarar que sin importar la técnica utilizada es el especialista en ortodoncia el que tiene las destrezas para hacerlo funcionar y alcanzar los objetivos. Ten siempre en cuenta que lo más recomendable es que el profesional que inicie el tratamiento debe culminarlo, porque conoce desde un principio la planeación de éste.

Tu cuerpo es una compleja máquina. Los alimentos que eliges y la frecuencia con la que los comes afecta tu estado general de salud y por consiguiente el de tus dientes y encías. Si consumes demasiados refrescos azucarados, bebidas frutales endulzadas y aperitivos poco nutritivos, podrías correr el riesgo de sufrir caries dentales. La caries dental es la enfermedad infantil crónica más común, pero la buena noticia es que se puede prevenir.

Si tu dieta carece de ciertos nutrientes, puede ser más difícil que los tejidos en la boca resistan una infección. Esto puede contribuir a la enfermedad de las encías. Un caso grave de enfermedad de las encías es una de las principales causas de pérdida dental en los adultos. Muchos investigadores creen que la enfermedad avanza de forma más rápida y es potencialmente más grave en personas con una mala alimentación.

Decisiones inteligentes

Para disfrutar de una vida sana y de dientes y encías sanos, piensa antes de comer. No es solo lo que comes sino cuándo lo comes lo que marca una gran diferencia en tu salud bucodental. Los alimentos que se consumen en el marco de una comida resultan menos nocivos porque se libera más saliva durante la comida, lo que ayuda a eliminar los restos de alimentos de la boca y contribuye a reducir los efectos de los ácidos. Sigue siempre una dieta equilibrada. Si llevas una dieta especial, ten en cuenta el consejo del médico a la hora de elegir tus alimentos.